El hombre que yo amo tiene algo
de niño
la sonrisa ancha, tierna la
mirada
tiene la palabra de mil hombres
juntos
y es mi loco amante, sabio,
inteligente.
El hombre que yo amo no le teme
a nada,
pero cuando ama lo extremece
todo.
Guerrero incansable, en busca de
aventuras,
tiene manos fuertes, cálidas y
puras.
El hombre que yo amo sabe que lo
amo
me toma en sus brazos y lo
olvido todo
el es mi motivo, es mi propio
sol.
El me da alegrías que nadie me
dio.
El hombre que yo amo sabe que lo
amo
vuela siempre lejos, pero vuelve
al nido
el hombre que yo amo sabe que lo
amo
yo lo quiero loco, pero loco
mío.
El hombre que yo amo siempre
sabe todo
no sabe de enojos, no entiende
rencores
el arregla todo con sabiduría
con sólo mirarme me alegra la
vida
El hombre que yo amo camina en
mi mente,
es mi único ídolo entre tanta
gente,
el hace una fiesta con mi pelo
suelto,
ladrón de mis sueños, duende de
mi almohada
Myriam Hernández,
1988